domingo, 20 de noviembre de 2011

Sin retorno

Hagamos un viaje
sin pasajes ni estadías,naciendo en el camino
buscando ese rostro hermano,postergado.
los pies desnudos
las manos destruidas.
Vamos a curarnos compañero
de la hipocresía que nos busca la sangre
el hambre de felicidad se respira
en Buenos Aires
en la calle
en las puertas de viejos zaguanes
quiero un viaje que comience ahora mismo,cuando abras esa puerta
no quiero un eslogan en tu remera
no quiero la cara del Che en las grandes tiendas
quiero el camino sin banderas
la voz que se desgarra desde una mirada
la manta de dos brazos contra la noche,contra todo el cielo.