Uno es feliz o al menos intenta serlo;uno sufre,claro,como no va a sufrir? pero igual da pelea y le pone el pecho a las balas,al laburo,a la flia,a las responsabilidades...en fin,al día a día y podemos decir que uno la zafa como puede.
Es aquí donde aparece la persona que a propósito (o no)cuestiona todo esto,nos hace pensar si somos merecedores de la dicha conseguida y por mas que a uno le importe un bledo lo que digan los de afuera,siempre hay un cuestionador de la felicidad ajena que gusta de alterar el remanso ganado(que capaz que solo es un remansito,y atrás hay mil dramas,pero igual el inquisidor estará ahí)
Estoy segura de que estas personas son tremendamente infelices,que no pueden ver mas allá de lo que tiene los otros y miden sus expectativas en base a lo conquistado a fuerza de sudor y lágrimas por un pobre diablo que como la gran mayoría la lucha todo el día.
De mi vida los quiero lejos.
2 comentarios:
Maga.. está perfecto. Si uno tiene lo mejor para dar y del otro lado no lo ven, ellos se lo pierden. Abundan los infelices... ya tienen con ellos bastante. Un beso grande.
supongo que es asi lu,lo importante es que si uno tiene algo que dar,lo de sin medida..besotes
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